A distancia
A ella le gustaban los días grises, él disfrutaba más, los días soleados. Ella siempre iba por un café, él pedía una cerveza en el mismo bar. Ellos aman a los perros, la poesía y la luna, también sospechan amarse entre sí, de vez en cuando se escriben un par de palabras acompañadas de besos a distancia. Hasta hoy, no se han visto a la cara.